Era un rey muy joven y muy sabio, Salomón. Su padre, el rey David, poco antes de morir, convocó la corte y anunció a sus príncipes: "De todos mis hijos (porque el Señor me dio muchos), eligió
¿Era posible que hace apenas un año tuviera una familia numerosa y feliz de diez personas y ahora, un año después, casi todos hayan desaparecido? Era como si sus recuerdos pertenecieran a otra persona.
En una pequeña sinagoga, no lejos de las dos torres del World Trade Center, como de costumbre, un grupo de judíos ortodoxos se reunió, temprano en la mañana, para oficiar las oraciones matutinas. Normalmente, no es
El rey Salomón heredó innumerables riquezas de su padre, David, y, gracias a la sabiduría que le era propia, supo hacerlas prosperar. Cada uno de sus proyectos siempre se llevó a cabo con éxito y su gloria se extendió por el mundo. "De quien es
Debí estar loco por comprar solo un rimón y no el par completo. No serviría a una sinagoga ni a un coleccionista de objetos judíos; la compra seria pura
Era la primera noche de Janucá. Afuera, una tormenta de nieve azotaba la región, pero dentro de la casa reinaba paz y calidez. El Rebe, Rabí Baruj de Mezhibuz, nieto del Baal Shem Tov, se puso de pie.
¡Mensage enviada!
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Cargando
Encendiendo las velas